La presencia de los mosquitos Aedes aegypti y anofeles, transmisores del dengue y la malaria respectivamente, preocupa a las autoridades del Ministerio de Salud en la provincia de Chiriquí.
El jefe regional del departamento de Control de Vectores, Patricio Camarena informó que durante el presente año se han confirmado en Chiriquí mil 717 casos de dengue y 66 de malaria.
A inicio de la presente semana se descubrieron dos nuevos casos de malaria en el distrito de Barú; ambos miembros del Servicio Nacional Fronteras procedentes de Darién y la comarca Guna Yala.
Camarena advirtió que, aunque las personas infectadas de malaria contrajeron esta enfermedad en otras regiones del país, el MINSA implementará los mecanismos de prevención, como la nebulización de insecticidas y la dotación de mosquiteros en las áreas infestadas de anofeles.
El funcionario destacó que la eliminación de potenciales criaderos de Aedes aegypti es la única manera de prevenir el dengue, tanto en temporada lluviosa como seca.