Iniciado el año escolar presencial a nivel nacional, luego de 24 meses no acudir a los centros educativos a causa de la pandemia, el Ministerio de Salud, no baja la guardia y reitera a la población la importancia de reforzar las medidas de bioseguridad, el cuidado de la salud mental y emocional, además de la alimentación de nuestros estudiantes.
Una lonchera saludable representa un buen rendimiento escolar, por tanto, los padres de familia y los maestros son los responsables de una buena nutrición y hábitos alimenticios apropiados, sin obviar que el desayuno es una de las comidas más importante para iniciar una jornada.
Para los estudiantes en etapa preescolar una buena alimentación y saludable debe estar compuesta por frutas, lácteos, vegetales, granos y carnes con porciones adecuadas.
Los profesionales de la Salud recomiendan el evitar las comidas chatarra, gaseosas, saturación de grasas y/o azucares, ya que pueden causar enfermedades cardiovasculares, obesidad y riesgo de cáncer.
Algunas sugerencias de meriendas nutritivas fáciles y económicas son, lunes: 1 envase de 8 onzas de melón picadito, galletas de soda, atún con tomate picado con una cucharadita de mayonesa y para beber, agua; martes: 1 vaso de jugo de frutas natural, emparedado de queso con tomate y un chocolate pequeño.
Miércoles: 1 yogurt de frutas, emparedado con huevo revuelto, una manzana y para beber, agua; jueves: 1 vaso con crema de avena, 1 cajita de pasitas, galletas saladitas y una fruta. Viernes: 1 naranja pelada y partida al medio, emparedado de jamón de pavo, un paquete de maní y para beber, agua.
Las autoridades de Salud recuerdan a los padres dedicar tiempo para la comida en familia, resulta un momento agradable para compartir y establecer buenos hábitos, además no olvidar el reforzar las medidas de bioseguridad con el lavado frecuente de las manos con agua y jabón, el uso de la mascarilla y la pantalla facial y aprovechar las clases presenciales impulsando un futuro profesional.