A lo largo de nuestras vidas experimentamos diversas emociones y situaciones adversas, que en algunos casos desafían nuestro instinto de auto conservación; pero precisamente es la vida el gran privilegio al que no debemos renunciar; y la muerte el único estado irreversible que podemos enfrentar.
Independiente de la condición social, económica, de las preferencias sexuales, de las posiciones ideológicas y religiosas; y de la capacidad de empatía que pueda tener una persona: a través de nuestros sentidos percibimos la maravillosa naturaleza, la libertad y la posibilidad de amar y ser amados.
El pasado domingo se conmemoró en Panamá el Día de la Prevención del Suicidio; en la actualidad, un a de las principales causas de muerte entre los adolescentes y adultos jóvenes, ya que un promedio mensual de 10 personas se quitan la vida, la mayoría con edades de entre 15 y 49 años.
La mayoría de casos de situaciones que perturban la paz de una persona son transitorios y no provocan secuelas; de lo contrario las personas y/o familias deben buscar ayuda de psicólogos, psiquiatras o trabajadores sociales, profesionales que se encuentran en la mayoría de instalaciones del Ministerio de Salud.
Generalmente el suicidio es consecuencia de problemas de salud mental, como trastornos del sueño, fatiga, consumo de drogas y alcohol, aislamiento, ira o mal humor. También puede responder a la desesperación causada por problemas inesperados como la perdida de seres amados.
Gladys Novoa directora regional de Salud explicó que, consciente de su responsabilidad como regente de la salud pública, el Ministerio de Salud en Chiriquí brinda servicios de salud mental en Puerto Armuelles, Río Sereno, Volcán, Aserríos, La Estrella, La Mata de Bugaba, Santo Domingo, Boquerón, Alanje, Boquete, Los Anastasios, Gualaca, San Lorenzo; en todos los Centros de Salud de David y en su sede regional.
Novoa, recordó que durante la semana se realizan en todas las instalaciones al Ministerio de salud actividades relacionadas a la prevención del suicidio, incluso el mensaje se extiende hasta algunos planteles educativos donde los educadores de la salud realizan intervenciones así como los grupos dedicados a la niñez y adolescencia mediante los programas que ejecuta esta institución.
Las personas no deciden quitarse la vida de forma espontánea; sino que durante un prolongado periodo, progresivamente se desmotivan hasta caer en un avanzado estado de depresión, que pudo evitarse con la oportuna intervención clínica profesional y el apoyo decidido de la familia y demás seres queridos.
