La directora médica del Ministerio de Salud en Chiriquí, Gladys Novoa, atendió las inquietudes de un grupo de ambientalistas sobre la contaminación de los afluentes naturales, principalmente los que abastecen las plantas potabilizadoras.
El ambientalista Jaime Cano, destacó la necesidad de practicar estudios de laboratorio a las principales 35 fuentes hídricas de esta provincia para comprobar que las mismas son aptas para el consumo humano y actividades de recreación.
El anterior análisis de calidad de las aguas del río David, determinaron que los niveles de contaminación era un centenar de veces más alto de lo recomendado; debido en gran medida a que recibe las aguas servidas de proyectos residenciales e industrias, instaladas cerca de sus afluentes.
La regente de salud señaló que comparte la preocupación de los ambientalistas sobre los impactos del crecimiento urbano y el desarrollo de actividades agroindustriales; por lo que, en conjunto con otras instituciones y autoridades municipales correspondientes, buscan solucionar cada problema en particular.
“La responsabilidad de dotar a la población de agua potable de calidad y la preservación de las fuentes naturales, es compartida por el Minsa con el Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales (Idaan) y el Ministerio del Ambiente (Mi Ambiente), el Ministerio de Vivienda Y Organización Territorial (Miviot) así como las empresas que desarrollan las urbanizaciones”, destacó Novoa.
La funcionaria señaló que la producción de agua potable (inocua), es determinante para alcanzar y mantener la salud de la población; por lo que el estado debe tomar acciones que aseguren la misma para las actuales y futuras generaciones.
Novoa reconoció el derecho de los ciudadanos de adquirir una vivienda y la importancia del desarrollo económico; pero advirtió que estas actividades no deben afectar las fuentes de agua y el entorno ambiental. Minsa Chiriquí atiende inquietud de ambientalistas