La pandemia ocasionada por la COVID-19 ha tenido un impacto en la salud mental en la población a nivel mundial y en ese sentido los profesionales en psicología de las diferentes instalaciones de salud en el país han fortalecido las acciones para orientar a las personas afectadas emocionalmente, indicó Delia De Ycaza Coordinadora Nacional de Salud Mental del Ministerio de Salud.
De Ycaza sostuvo, que entre las acciones que se han implementado para proteger la salud mental de la población se encuentra la atención a través de la línea de atención psicológica 169 opción 2 que ha funcionado desde abril del 2020, donde un especialista le brinda apoyo. Resaltó que más de 5,000 personas han recibido atención por medio de esta línea de orientación psicológica.
A raíz de la emergencia epidemiológica, uno de los principales desafíos ha sido el de emprender un plan de respuesta de salud mental frente a la pandemia; sin embargo, se trabaja con el apoyo interinstitucional para consolidar los objetivos que es proteger el componente psicosocial, manifestó la especialista.
“Son muchos los riesgos, las consecuencias y secuelas que tiene el mortal virus sobre la población en general, desde niños hasta adultos mayores, donde se puede resaltar el personal que ha laborado en la primera línea de batalla”, expresó la psicóloga.
Dijo que medidas restrictivas como el distanciamiento social y todos los cambios en la rutina diaria han afectado emocionalmente a las personas las cuales en muchos casos han reactivado trastornos que ya habían padecido.
La especialista dejo claro en que las personas deben saber pedir la ayuda de un profesional de la salud psicólogos, psiquiatras, trabajadores sociales etc. que los guie hasta salir adelante.
Finalmente, De Ycaza, reiteró vigilar y cuidar la salud mental ya que ha quedado demostrado durante la pandemia que es tan importante como la salud física.
Indicó que continúa la atención en la línea 169 y los profesionales en psicología siguen con la orientación en atención primaria, centros de salud y hospitales.
De acuerdo con la Organización Panamericana de la salud (OPS), el temor de contraer el virus en una pandemia como la de COVID-19, se suma el impacto de los importantes cambios en nuestra vida cotidiana provocados por los esfuerzos para contener y frenar la propagación del virus.