Personal de Salud Pública de la región de Salud de Herrera, en conjunto con auditores internos, asesoría legal y la dirección regional, participaron en la diligencia de inspección y destrucción de cigarrillos que forman parte de un proceso legal por contrabando y defraudación aduanera.
Tras una resolución por parte de la dirección general de Salud Pública del Ministerio de Salud, se autorizó a la dirección regional para la destrucción de estos artículos, por tratarse de un tema que afecta la salud de la población.
El director regional, Luis Pérez, indicó que los funcionarios regionales participaron de esta diligencia, en coordinación con otras entidades como el Ministerio Público, la Dirección Nacional de Aduanas y la Policía Nacional.
Se trata de un total 1,642 bultos, más 47 cartones y 12 cajetillas sueltas de cigarrillos de varias marcas, valoradas en 1.8 millones de dólares aproximadamente, decomisados en un proceso que inició en el año 2020.
Los cigarrillos fueron enviados a un incinerador para su destrucción.
